sábado, 25 de diciembre de 2004

semiología

ejemplos de lenguaje fosilizado:

- boca de rubí
- ojos como faros - lo cortés no quita lo valiente
- paleontología

jueves, 23 de diciembre de 2004

las personas bonsai


las personas bonsai no son enanas, pero lo parecen. tienen el privilegio de alcanzar la madurez sin perder la inocencia del cuerpo chiquitito. la gente bonsai es gente diminuta -vaya si lo es-, pero no pequeña. cuando se despiden no consiguen abrazar a sus seres queridos de cortos que son sus brazos. les encanta jugar con bebés pero hace rato que ellos mismos renunciaron al chupete. no hay nada que deseen tanto como colarse en el bolsillo de ciertos personajes, aunque ya sean bastante grandes para tales menesteres. 
las personas bonsai no son enanas, pero lo parecen. convencidos de que su voz tiene un volumen acorde a su cuerpo hablan poco y nada. incluso han olvidado cómo expresar lo imprescindible. son gente de estatura corta con elevadas intenciones. 
las personas bonsai son viejas, pero jóvenes. especie de peter pan con canas en el cuerpo de un viejo de ocho años. austeros y tranquilos, no se andan con chiquitas: cada noche, antes de dormirse, sueñan que son gigantes que trepan por la ventana y se acuestan sobre los labios anhelados. 
las personas bonsai no son enanas, pero lo parecen. sus pasos cortos deben multiplicarse para cubrir cualquier distancia. la gente diminuta anda en busca de su hogar, de su maceta idiosincrática en donde cae el agua que alimenta. son generosos y nobles, pero sus deseos no recorren más distancia que la de sus estocadas. 
las personas bonsai no son enanas, pero lo parecen. y de tanto parecer, a veces terminan siéndolo.

miércoles, 15 de diciembre de 2004

entrevistas II: elton john

En 1973, pasó bastante tiempo con John Lennon...

Recuerdo estar en una habitación del hotel Sherry Netherlands con John y los dos bajo el efecto de la cocaína. A las 3 de la mañana se oyó un golpe en la puerta y los dos miramos por el agujero de la cerradura; era Andy Warhol. Nos quedamos ahí, paranoicos, susurrando: No lo dejen entrar.

martes, 14 de diciembre de 2004

entrevistas I: collin farrel

Tus colegas hablan de lo mucho que trabajás, pero lo que se lee en los medios es lo mucho que te gusta divertirte. ¿Te molesta?
No. Pero la verdad es que me divierto como cualquiera, independientemente de su profesión: trabajo mucho y me divierto mucho. En la medida en que tu trabajo y tus vínculos no sufran, está todo bien. Voy a trabajar, hago lo que tengo que hacer, me divierto y no me importa nada.
¿Entonces tu vida sexual no es tan agitada como se supone?
Si fuera como dicen, ya se me habría caído el pito.